Las carabelas de Colón

El Lunes amaneció, por primera vez en todo el fin de semana, soleado. Al llegar a Dársena presenciamos el siguiente espectáculo (adjunto fotos porque no hay palabras que lo describan).

Aparentemente los jóvenes llegaron entrada la madrugada al Club y mientras esperaban ansiosos en el horizonte la llegada de Colón, se quedaron dormidos. Increíble la técnica que desarrollaron de “carpa – bolsa de dormir”, estimo que en el futuro será fuertemente imitada por otros integrantes de la Clase que gustan pernoctar cerca de su yate, como el caso del Gran Pelotita.
Dicho esto, comenzaron los preparativos propios de la jornada. Aparentemente el viento (o la noche) del día anterior dejaron varias bajas. La más notoria siendo Buchucholz que no se puedo levantar de la carpa y murió allí. También se destacó la ausencia de un jovencito, hermano de una autoridad de esta Clase, que simplemente desapareció de la faz de la tierra. “Tiene que estar por algún lugar de Nordelta, solo espero que no sea el fondo de la laguna” señaló el adulto responsable de velar por su seguridad.
La intensidad del viento al momento de salir al agua era óptima, pero esto no duró mucho, al morir definitivamente el viento en el transcurso de la primera regata. El sotavento encontró así un manojo de barcos que navegaban en direcciones insólitas e incluso para atrás. Niños con ADD incapaces de quedarse quietos en sus embarcaciones rogando que se alzara en la lancha la bandera a cuadros. Finalmente la regata fue anulada lo que propició la clásica “juntadita a matar el tiempo” en los distintos botes.
Allí se sucedieron todo tipo de anécdotas, conjeturas e historias. Por ejemplo, pudimos aprender que las regatas de radiocontrolados las larga un buzo tactico en las lagunas de Palermo (no puedo creer que alguien realmente haya creído eso) o que Katu no es Moira y que Moira no es la novia de Hirry (algo que a algunos todavía les cuesta distinguir). Entre hombres semidesnudos excedidos de peso y frases “ese chico no tiene un cuerpo normal para su edad, para mi toma algo” o “no me puedo decidir si el de la zunga o el de las calcitas” pasamos flotando parte de la mañana.
Por suerte el viento terminó por establecerse y aumentar su intensidad para poder llevar a cabo 4 hermosas regatas. Los momentos más destacables se reducen a dos.
Momento 1: el enredo entre Mosta y el Ingeniero en una largada. Luego del top (que fue llamada general) seguían totalmente enganchados sin poder ir hacia ningún lado. “Me rompes el barco y te mato”, “movete porque te juro que te mato” y “te mato, te mato” fueron las frases pronunciadas por el simio mientras caminaba velozmente hacia la proa. “No Mosta no lo hagas” gritaba Belu cuan doncella desesperada. Finalmente Mosta llega hasta su stay y violentamente separa los barcos. Sinceramente faltaron 2 micromilesimas de segundo para que aborde el barco rival y le estampara los anteojitos a Hirry en la nariz. Entre nos, yo ya me había imaginando a Mosta tomándolo del cuello, faltó poco.
Momento 2: uno de los protagonistas del fin de semana fueron, sin dudas, los F18. Algunos navegados por kayakistas de la zona de Acassuso, poco estaban preparados para enfrentar una regata en la misma cancha que otras decenas de barcos y mucho menos para controlar las velocidades que alcanzaban. En este contexto venia la joven Agus “Heidi de las praderas” Branz navegando en su 29er gricesito, llena de esperanzas mientras tarareaba Yellow Submarine (Juan le hacia los coros, solo para que se lo imaginen). De repente vio asomar en su proa un monstruo de dos pontones que inesperadamente trabuchó y se dirigía hacia ella a toda velocidad. Presa de la desesperación y con su ya popular cara de susto (para los que no la conocen pueden acercarse a la carpa, allí encontraran una foto de Capizzano que magníficamente la inmortalizó con su lente) alcanzó a derivar solo para ser ferozmente embestida en una de sus bandas. Lo que pasó ya lo puede imaginar usted, amigo lector. El F18 se tumbó, Agus fue presa de un ataque de histeria, Juan todavía no entendía que había pasado, pitos y flautas. Por suerte no hubo que lamentar heridos. Estamos por lanzar una campaña vial “con precaución con precaución, en F18 precaución”.

Foto de Agus "Cara de Susto"

Llamo finalmente, a una última reflexión: a todos se nos rompen cosas y tenemos inconvenientes, no por ellos hay que vulnerar las reglas que nos rigen.

Pueden encontrar información, resultados, fotos, videos y los informes de prensa sobre el campeonato acá.
XOXO

Disclaimer: el presente texto representa SOLO la opinión de la autora y no refleja en ninguna manera la opinión de la Asociación de Skiff Argentina y de la Clase 29er en su conjunto. Los hechos y personajes citados en la presente son ficción y cualquier similitud con la realidad es mera coincidencia.